KENIA

SAFARI KENIA?

Hola viajer@s!! Os habéis planteado alguna vez viajar a África? Y en concreto, ¿visitar la sabana africana? Si es así, seguid leyendo que os explicaremos los detalles de nuestro safari de una semana por Kenia. No os lo perdáis!!
 
¡¡Asante!! (gracias en swahili) 😉

La República de Kenia es un país del este de África formado por 47 distritos, cada uno de ellos con un gobierno semiautónomo respecto al gobierno central de Nairobi, la capital. Su nombre se debe al monte Kenia, la montaña más alta de África, y el país destaca por su biodiversidad en animales y una gran variedad de ecosistemas. Kenia es un país cuyos ingresos provienen fundamentalmente del turismo aunque siempre se ha dedicado a la agricultura y en concreto, a la producción de té y café.

Cuando te decides a viajar a Kenia, es impensable no plantearse hacer un safari y disfrutar de toda la belleza que hay en este maravilloso país. Safari significa «viaje» en swahili, la lengua oficial de la República de Kenia junto con el inglés. 

¿CÓMO SURGIÓ LA IDEA DE HACER UN SAFARI?

Una tarde estábamos en el sofá pensando en diferentes destinos donde ir en verano. La Costa Oeste de los EEUU, Japón o las Islas Griegas fueron algunos de los lugares que contemplamos para nuestras vacaciones del verano de 2015. Ya nos suele pasar… tan pronto uno de los dos dice un posible destino como seguido el otro dice un lugar en la otra punta del mundo! jaja. Como lo queremos visitar todo y todavía nos queda taaanto por ver! Nos volvemos un poco locos eligiendo los destinos! Y en una de esas, dijimos: ¿y un safari por África? Pusimos safari en Google y empezamos a mirar cual era la mejor época, precios aproximados… y para cuándo nos dimos cuenta, ya no teníamos otro destino más en mente que no fuera hacer un safari! 🙂

LOS PREPARATIVOS

Lo primero que nos planteamos fue: concretar el tiempo del que disponíamos para hacer el viaje y el presupuesto. Lo primero fue fácil, 15 días. Lo segundo, ya no tanto. ¿Por qué? Pues porque como seguramente os habrá pasado a vosotros también, empiezas fijando un presupuesto y poco a poco te vas dando cuenta que quieres hacer más cosas, alargar unos días a algún sitio de playa, los billetes de avión son caros…y entonces es cuando el presupuesto se te empieza a ir de las manos!! jaja. Finalmente y después de pensarlo bien, decidimos que haríamos un safari de una semana por Kenia (también nos planteamos Tanzania pero se nos alargaba mucho más) y preferimos añadir 5 días más al viaje para descansar en la isla de Zanzíbar y aprovechar a visitarla. La verdad, un acierto la decisión! Zanzíbar tiene playa pero también actividades para hacer y visitar. En el post de Zanzíbar os lo explicaremos.

– Isla de Zanzíbar –

En un primer momento nos planteamos organizar el safari por nuestra cuenta , alquilando un coche al llegar a Nairobi y desde allí ir nosotros mismos conduciendo y visitando los diferente parques y reservas nacionales que queríamos ver (ideas de Angel Luís, que suele ser más aventurero que yo…) Después de informarnos un poco, descartamos la idea. ¿Los motivos? Por un lado la comodidad y por otro, la seguridad. Lógicamente, organizar tu mismo por completo cualquier viaje y tener que «espabilarte» para moverte por el país a visitar es una motivación extra en todo viaje, pero depende del lugar del que se trate es más o menos fácil. En este caso, el viaje requería de muchos preparativos previos que eran difíciles de gestionar estando tan lejos, y a parte de eso, las carreteras y la seguridad en Kenia no es la misma que la que podamos tener aquí. Moverse dentro de los parques sin tener el conocimiento necesario no es nada fácil, por no decir, imposible. Los parques son muy extensos y es muy complicado encontrar según qué animales si no sabes donde buscar. Así que finalmente nos decantamos por buscar un poco de ayuda externa y para la organización del viaje contamos con el apoyo de una agencia de viajes local de Tanzania, Tabia Safaris, que tiene sede en Arusha y está especializada en safaris por Kenia, Tanzania y Uganda. Miramos otras agencias tanto de aquí como de Kenia, incluso algun freelance, y la verdad es que Tabia Safaris nos convenció desde el primer momento que hablamos con ellos. Son un equipo de profesionales que desde 2002 organizan safaris a medida con calidad y ajustándose al máximo en las necesidades del viajero. Aquí os dejamos su web por si queréis echarle un vistazo.

Y así, con unos 5 meses de antelación, empezamos a preparar el que sería uno de nuestros viajes más imborrables.

– Jeep 4×4 –

En los preparativos tuvimos que tener en cuenta todo el material que hay que llevarse (medicinas, repelentes), dinero, visado, ropa con la que vestirte durante esos días (parece una tontería pero a mi me llevó un tiempo organizarme la maleta) y las vacunas o precauciones sanitarias que hay que tomar antes y durante el viaje. Todo eso os lo intentaremos explicar en breve en un nuevo post que tenemos pensado hacer.

ÉPOCA PARA HACER UN SAFARI

La mayoría de vosotros os pondréis muy contentos al leer que la época ideal para hacer un safari por Kenia es durante los meses de mayo y septiembre. Y decimos que os hará felices saber esto porque es cuando la mayoría de nosotros tenemos vacaciones para poder hacer una viajecito largo. Julio y agosto son fechas muy recomendables para hacer un safari porque es durante esta época «estación seca» que se produce el fenómeno migratorio más espectacular que podemos ver. Los animales herbívoros del centro y sur de Tanzania, en concreto del Parque Nacional de Serengeti, se desplazan hasta Masai Mara en busca de verdes y húmedas praderas. Las gacelas, cebras y ñus en su mayoría, emigran hasta el Masai Mara donde vivirán los próximos meses. Manadas de elefantes, jirafas pero también animales carnívoros como leones y guepardos las seguirán para alimentarse igualmente.

– Jirafa reticulada en Samburu –

PRESUPUESTO APROXIMADO

Si os estáis planteando hacer un safari por Kenia, el presupuesto lo marcaréis bastante vosotros mismos. Nuestra experiencia nos dice que de un presupuesto de unos 1500 euros será difícil bajar, pero todo dependerá de varios factores: época del año que elijáis, cantidad de días de safari, transporte, parques que queráis visitar, etc.

Podéis hacer el safari de diferentes maneras y por tanto, con diferentes presupuestos. Nosotros hicimos el safari en un jeep 4×4 en el que viajamos siempre solos con nuestro guía, pero también lo puedes hacer con otras parejas y así compartes gastos. Otra opción es hacer el safari en una especie de camión donde vives en él durante unos días y lo compartes con más personas (nosotros lo estuvimos mirando porque parece muy chulo y aventurero!). Y sino, también te queda la opción de moverte de un parque a otro en avioneta (mucho más caro, claro, pero también tiene que ser una pasada ver la sabana africana desde el cielo!).

También hay que tener en cuenta otros aspectos a la hora de marcaros un presupuesto, los hoteles. Según la categoría que queráis escoger, el presupuesto variará. Eso lo sabemos todos, pero depende del país donde vayas, se nota más o menos. Nosotros elegimos una categoría medio-alta, nos apetecía estar cómodos después de llegar del safari y descansar a gusto. En el post sobre hoteles, os explicamos con detalles los que nosotros elegimos.

El visado para viajar a Kenia (40euros), la medicación y las excursiones extras que hagas durante el viaje también es dinero a tener en cuenta en el presupuesto. Y con eso nos referimos a ir a ver un poblado de alguna tribu (al final es poquito dinero pero todo suma), volar en globo por la zona (nos quedamos con las ganas.. pero se nos disparaba el presupuesto!), las propinas del guía, etc. son extras que también debes de tener en cuenta y podrá variar un poco lo que acabes gastándote.

Y si después del safari quieres hacer lo que le dicen «extensión a la playa», que es lo que hicimos nosotros en Zanzíbar…pues tendrás que sumar vuelos, hoteles y lo que te cueste alguna excursión que quieras hacer allí. En el post de Zanzíbar os lo explicamos.

ITINERARIO ESCOGIDO

Nuestra idea fue poder ver en una semana lo máximo de naturaleza y animales posible y después alargar el viaje unos días en Zanzíbar, un destino más de playa y relax.

Esta fue nuestra programación definitiva del viaje. Durante semanas estuvimos informándonos y confeccionando con la agencia el recorrido que queríamos hacer, los vuelos y los hoteles elegidos. Y al final quedó así:

De la compra de los vuelos se encargó la agencia, así como de las reservas de los hoteles. Nosotros miramos por nuestra cuenta combinaciones de vuelos que se adecuaban mejor a nuestro presupuesto y horario, y así se los trasladamos a la agencia. En cuanto a los hoteles, similar. La agencia nos facilitó una relación de hoteles que nos recomendaron y nosotros fuimos consultando sus webs hasta decantarnos por los que elegimos y que podréis consultar en el post de hoteles que hemos hecho.

Nuestra recomendación: No os perdáis la oportunidad de dormir en una tienda de campaña en Enkerende Camp, en el mismo Masai Mara. ¡Es una experiencia única!

EL VIAJE

Volamos desde Barcelona a Dubai y de allí a Nairobi, capital de Kenia. Como no existían vuelos directos a Kenia hicimos escala en Dubai (no llegó a 3h de espera) y no se nos hizo pesado. El viaje fueron unas 15 horas en total que no se nos hizo excesivamente largo para ir, para volver un poco más! Volamos con la compañía Emirates y muy bien tanto la atención como la comida y la comodidad del avión.

Una vez en Nairobi, hicimos la primera noche en un hotel a las afueras de la ciudad. Nos habían comentado que el centro de la ciudad suele ser un poco caótica y que para moverse con el coche podíamos tardar mucho en entrar y salir de la ciudad, y para evitarlas decidimos quedarnos a las afueras, descansar por la noche en el hotel y empezar prontito al día siguiente nuestro safari por Kenia. Nos esperaban 7 días, 1075 km de carretera, 3 parques nacionales (Samburu, Nakuru y Masai Mara), 4 hoteles diferentes y muchos animales por ver!

PRIMER DÍA DE SAFARI

Salimos pronto de Nairobi, a las 8 de la mañana, dirección a la Reserva Nacional de Samburu en el jeep 4×4 donde pasaríamos horas y horas durante los próximos días. El caos para salir de Nairobi fue monumental y eso que empezamos pronto la travesía y habíamos dormido a las afueras.

El trayecto es largo, unas 7 horas aproximadamente, por unas carreteras un tanto destartaladas. En nuestra opinión, elegir un medio de transporte cómodo es importante porque te pasas bastantes horas en la carretera y el estado de éstas no es muy bueno. Nosotros nos planteamos compartir el jeep 4×4 que alquilamos a través de la agencia con alguna otra pareja. Pero finalmente ninguna se ajustaba al itinerario que habíamos confeccionado nosotros y al final fuimos solos y estuvo muy bien. Son muchas horas las que tienes que compartir coche y te encuentras que hay quien quiere pasar más rato viendo los elefantes, haciendo fotos, etc. El hecho de ir solos con el guía te da mayor flexibilidad y el guía se ajusta más a tus necesidades y es muy cómodo. Al final estás de vacaciones y es lo que también se busca, ir a tu aire y no depender de nadie.

En nuestro caso, tuvimos mucha suerte con el guía que nos tocó. Frank, un keniano de apenas 30 años, nos acompañó durante toda la semana del safari. Frank hablaba bien el castellano y el podernos comunicar con fluidez con él nos permitió que nos explicara un montón de cosas sobre los animales que nos íbamos encontrando en los parques, o los que él mismo buscaba (es sorprendente ver la capacidad de intuición que tienen los guías de safaris!). Pero también nos explicó la situación del país, cómo vivió Kenia la reciente visita del presidente Obama, la relación que tienen con los turistas, su familia, etc. Tenerlo a él como guía fue uno de los tantos regalos que tuvimos en este viaje. Aquí os dejamos una foto que nos hicimos en una parada que hicimos durante el recorrido.

Durante el camino es agradable ver el paisaje de Kenia, con sus cafetales y campos verdes, las paradas/mercados para comprar comida a pie de carretera, los niños saludándonos por los diferentes pueblos por los que pasábamos… Ya sólo por eso, vale la pena hacer el safari por carretera. 

– Cafetales durante el recorrido –
– Mercado en medio de la carretera –

La línea del ecuador cruza Kenia y los kenianos han aprovechado este hecho para hacer un poquito de negocio. Como va de paso, el guía nos llevó allí para que nos hicieran una demostración de cómo con solo un par de pasos te encuentras en un hemisferio o en el otro. A ver, está gracioso verlo, pero pensad que después alguna propina deberéis de dar. Y si encima te dan el diploma, como nos lo dieron a nosotros, pues igual te piden alguna monedilla más.. jaja.

Una vez llegamos a la Reserva Nacional de Samburu, dejamos las cosas en el hotel y comimos. El hotel se encuentra dentro de la misma reserva nacional y por tanto, a su alrededor hay animales, algunos de ellos (sobretodo jirafas) se acercan a beber cerca de las instalaciones y se pueden ver desde el comedor-restaurante del hotel. Sorprendente, no?! Aquí os dejamos una fotografía de nuestro hotel en Samburu, pero en el post dedicado a los hoteles, os explicamos más cositas sobre dónde nos hospedamos.

– Hotel Sopa Lodge de Samburu –

Y después de darnos un bañito en la piscina y cambiarnos de ropa (sí sí.. habéis leído bien, en la piscina porque la temperatura era buenísima, unos 26 grados) el guía nos llevó a dar una vuelta con el jeep por el parque. Era nuestro primer safari y nuestro primer contacto con la sabana africana, con su vegetación y sus fantásticos animales!!

Creo que es difícil expresar con palabras lo que se siente cuando te adentras en la sabana… simplemente, se puede definir con una palabra: LIBERTAD!

La Reserva Nacional de Samburu toma este nombre por el territorio en el que se encuentra: el pueblo Samburu, una tribu nómada estrechamente emparentada con los Másai, con los que comparte parte de su cultura.

Es una reserva relativamente pequeña, de 168km de extensión, en la que abundan las acacias, la floresta ribereña y la palmera Doum. Es un tipo de sabana arbústica y plana. Se nota mucha diferencia respecto a otros parques, como Masai Mara o Nakuru. Aquí la vegetación es muy seca y en ella abundan los elefantes, leopardos, leones, las girafas reticuladas y las cebras de Grevy. 

Entre las cebras de Grevy y las cebras que podemos ver en Masai Mara hay diferencias. Si os fijáis bien, las cebras que encontramos en Samburu (abreviaré a partir de ahora y evitaré poner «Reserva o Parque Nacional») tienen rayas en las barrigas y la complexión es más robusta. Además sus rayas son más estrechas y abundantes. A mi personalmente me pareció un animal impresionante, elegante y bonito. Seguramente hay otros animales como los leones o guepardos que son más atractivos por eso de ser felinos pero las cebras nos parecieron un animal muy bonito y que gana mucho verlo en vivo y en directo.

Aquí os dejamos un par de fotografías para que veáis las diferencias entre ambas cebras.

– Cebra de Grevy  y jirafas reticuladas en Samburu –
– Cebras bebiendo agua en Masai Mara –

Como curiosidad os explicamos que nosotros notamos mucha diferencia entre los diferentes parques, en cuanto a temperatura y paisaje. En este caso, Samburu tiene una vegetación muy seca a diferencia de Masai Mara o Nakuru. Y la temperatura es más cálida en Samburu que en los otros dos que estuvimos.

– Familia de monos babuinos –

Y el primer día de safari acabó con un toque de suerte para nosotros ya que vimos al leopardo! Y digo suerte porque suele ser bastante difícil de ver, ya que es un animal bastante solitario que suele cazar durante la noche aprovechando su aguda vista nocturna y durante el día no se le suele ver tan fácilmente como a los leones. Fue bastante emocionante y más teniendo en cuenta que no lo volvimos a ver en el resto de los días en ninguno de los otros parques!

Una vez finalizado el safari, ducha, cena y a descansar! Que al día siguiente teníamos mucho más por ver!!

SEGUNDO DÍA DE SAFARI

El segundo día de safari empezamos pronto, sobre las 8 de la mañana. Aunque no somos mucho de madrugar, en estos casos es cuando no nos cuesta nada y vale la pena hacerlo con tal de disfrutar de la naturaleza y del despertar de los animales.

Se recomienda hacer los safaris pronto por la mañana o a última del día para evitar las horas de más calor y sol, ya que es cuando los animales suelen descansar en la sombra y es mucho más difícil verlos.

En esta foto podéis observar el tipo de terreno que os comentábamos anteriormente. Las acacias y un terreno más bien seco, es característico del territorio. De fondo una manada de elefantes, seguramente en busca de agua. Aunque no lo parezca, los elefantes beben mucho…unos 200 litros al día!! Y consumen unos 220 kilos de comida al día!! Se pasan el día comiendo y bebiendo, así que poco tiempo les queda para dormir.

– Familia de elefantes –

Durante los días de safari, nuestro guía nos fue explicando curiosidades de los animales que íbamos descubriendo en la sabana africana y que nosotros compartiremos con vosotros a lo largo de este post. ¿Sabéis que los elefantes viven en una sociedad matriarcal? ¿Y que es la hembra más adulta la que lidera la manada? ¿o que el período de gestación del elefante es de 22 meses? El más largo de todos los animales terrestres…!! Y lo más gracioso… como no son capaces de sudar se suelen bañar en lodo para refrescarse y se abanican con sus propias orejas los días de mucho calor! jaja

La verdad es que es muy interesante aprender cosas que desconoces de los animales a medida que los vas viendo en su hábitat natural. Conocer sus maneras de vivir, su alimentación y la manera de relacionarse con los otros animales con los que conviven de forma pacífica es maravilloso.

Uno de los momentos del safari más emocionantes de ese día pero también de toda la semana fue ver cómo una manada de leonas acababan de cazar una cebra y se la estaban comiendo. Mientras tanto, los buitres esperaban al otro lado del riachuelo para comer las sobras. En la fotografía podéis ver como las leonas esperan también cada una su turno para comer.

– Leonas comiendo una cebra y los buitres esperan –
– Leona descansando después de haber comido –

Es curioso como una escena como ésta puede parecerte lo más normal del mundo cuando te encuentras de safari. Es el instinto de supervivencia de los animales, luchar por subsistir y adaptarse al medio como puedan. «El ciclo sin fin», esa canción que tanto hemos escuchado y cantado de la película de «El Rey León» cuando éramos pequeños… en definitiva, es eso, el ciclo de la vida!

En Samburu también abundan los impalas. Son un tipo de antílope de estatura mediana que se caracteriza por sus grandes saltos que pueden llegar a alcanzar los 10m de longitud. Los machos tienen cuernos y son un poco más grandes que las hembras. Es un animal que pasa un poco desapercibido en los safaris ya que hay otros que son más llamativos o difíciles de ver, pero la verdad es que es un animal muy bonito.

– Impalas hembras –

Los impalas machos luchan entre ellos con sus cuernos para quedarse con una manada de hembras. Pueden llegar a tener cientos de hembras y ser ellos los únicos machos adultos con ellas!

– Impala macho –

Y después de pasar la mañana de safari fuimos a comer y descansar un rato al hotel. Por la tarde salimos de nuevo a dar una vuelta, y nos encontramos a una manada de leones descansando plácidamente. El sol ya no era tan intenso como por la mañana, así que descansan mejor. En la foto podéis apreciar que son cachorros, no llegarán a tener ni un año, según nos dijo el guía. Los machos logran la madurez a los tres años de edad y con cuatro o cinco años ya son capaces de desafiar y desbancar al macho adulto de otra manada.

– Leones descansando –

Y para acabar el día y que fuera del todo redondo, esta bonita estampa de elefantes.

TERCER DÍA DE SAFARI

Salimos pronto por la mañana de Samburu dirección al Parque Nacional Lago Nakuru. Por el camino, como ya es habitual, pasas por diferentes pueblos y paramos en uno de ellos a comprar unos refrescos y unas galletas para el camino (somos bastante golosos y con tantas horas en el coche, comer te distrae un rato..jiji). En el supermercado causamos furor, los únicos blancos! Se nos acercaban a preguntarnos cosas y hablar con nosotros muy amablemente. Nos sorprendieron los precios de los alimentos. Hicimos el cambio de la moneda y no nos parecieron baratas las cosas, es verdad que el producto de primera necesidad era económico, pero el resto de cosas, bastante caras para lo que pensamos que costarían.

Una vez llegamos al Lago Nakuru pudimos notar el cambio de temperatura. Aquí ir en manga corta y pantalón corto nos fue más complicado. Había llovido cuando llegamos así que nos plantamos los chubasqueros y salimos de ruta.

El lago Nakuru es el punto de reunión de muchas aves que pasan allí el invierno puesto que hay abundancia de algas que les sirve de alimento. El paisaje que se observa en el Parque Nacional Lago Nakuru es muy diferente al que habíamos visto en Samburu. Ya os habíamos comentado antes que era más seco, aquí no. El paisaje es mayormente verde con una sensación más húmeda y fresca.

– Lago Nakuru –

Por la tarde hicimos la primera salida, como os hemos dicho el tiempo no nos hizo muy bueno y eso hizo que no pudieramos ver muchos flamencos, pero vimos algunos. Ahora bien, ese manto de color rosa que suelen decir que se ve en el momento en el que todos los flamencos se posan en las aguas del Nakuru, no lo pudimos ver. Una pena.. pero a veces depende del momento, de la época, el tiempo.. se ven más o menos flamencos.

– Lago Nakuru –

A pesar de no haber podido disfrutar del espectáculo majestuoso que dicen que es verlos en el momento de su llegada, disfrutamos mucho de la excursión y de la naturaleza que se puede ver allí. Los contrastes de colores, de vegetación, animales, etc. Si hubiéramos llevado una cámara con un buen objetivo seguramente hubiéramos alcanzado a coger imágenes más bonitas, pero el presupuesto ya no daba para más! jaja

Y después del safari, una ducha y cenar en el hotel donde nos hospedamos. Una maravilla de sitio, donde pudimos charlar con otro viajero, enamorado de Kenia, que estaba con su familia y que ya la habían visitado en varias ocasiones.

CUARTO DÍA DE SAFARI

El día lo empezamos también prontito y nos dispusimos a hacer otra ruta con el jeep por el parque. En Nakuru las mañanas son más fresquitas que en Samburu y el ambiente se nota tan limpio que da gusto hasta madrugar.

– Cebras pastando cerca del Lago Nakuru –

A lo largo de este día pudimos ver búfalos, hipopótamos, cebras, monos babuinos y algún rinoceronte.

Uno de los animales que más nos sorprendió fue el búfalo. Quizás de los «Big Five» (5Grandes), el búfalo sea la especie que más indiferencia cause a simple vista, seguramente porque sea menos atractivo que el resto, pero la verdad es que está bien catalogado dentro de los 5 grandes ya que es una de las especies más agresivas que hay en África y en las distancias cortas, gana!

Los búfalos son animales que poseen pocos enemigos en estado salvaje. Las hienas, los cocodrilos y, sobre todo, los leones son sus principales amenazas. Tienen un gran sentido del olfato que lo utilitzan para localizar alimento pero también detectar peligro ya que pueden oler a un depredador hasta 350 metros de distancia. Aquí tenéis una fotografía donde se los puede ver tan tranquilos… pero por si a caso, yo no me fiaría!!

– Búfalos –

QUINTO DÍA DE SAFARI

Este día pudimos descansar un poquito más y no madrugar tanto. Emprendimos el camino dirección a Masai Mara, que son unas 5 horas de coche. Allí pasaríamos tres días y dos noches.

Masai Mara es una reserva natural que está situada al sudoeste de Kenia, en el condado de Narok. Es en realidad una continuación del parque nacional del Serengueti de Tanzania. Cada año existe un período migracional impresionante que tiene lugar durante los meses de Mayo a Septiembre. Los animales recorren más de 2000 millas y alrededor de 4000 toneladas de hierba al día para asentarse en territorio keniano.

– Reserva Natural Masai Mara –

En esta reserva abundan los elefantes, leones, cebras, ñus, gacelas de Thompson… También se puede encontrar el rinoceronte que está bastante amenazado, el hipopótamo y el guepardo.

– Ñus –

Los ñus son antílopes ungulados originarios del continente africano, que tienen una apariencia amenazante y que resultan fuente de alimento para una gran cantidad de depredadores. Tienen una cabeza muy grande en forma de caja y cuernos lisos y afilados curvados hacia arriba que crecen tanto en machos como en hembras. Los ñus son animales migratorios y están en constante movimiento. Durante los meses de mayo y junio, manadas de ñus dejan las zonas secas y viajan hacia el norte en busca de alimento y agua. Suele ser un viaje peligroso ya que durante su travesía suelen ser atacadados por los cocodrilos al cruzar los ríos. Los ñus jóvenes son protegidos por los más mayores.

El cocodrilo es una especie que también pudimos ver durante el safari y no es para menospreciarlo. Tiene la mordedura más fuerte del reino animal, ejerciendo una presión de 1800 Kg de fuerza. Suelen cazar a primera y última hora del día, evitando las horas de más calor. Sus presas pueden ser ñus, cebras y cualquiera que se le ponga cerca. Mejor no acercarse mucho porque sorprende la velocidad con la que se mueve cuando tiene intenciones de cazar.

– Cocodrilo descansando en la orilla del río, bajo el árbol –

En Masai Mara también se pueden encontrar hipopótamos. Esta especie es la tercera de los mamíferos vivos más grandes y más pesados ​​de la Tierra, después del elefante y el rinoceronte. Estos mamíferos son considerados semi-acuáticos y generalmente habitan en manglares, ríos y lagos. Durante el día, y más en la temporada de calor, suelen pasarse la mayor parte del día en el agua o el barro para mantenerse frescos y salen a pastar por la noche, por eso nos costó bastante verlos fuera del agua. El período de gestación suele ser de unos 8 meses y las crías suelen nacer en el agua.

– Hipopótamos sumergidos en agua –

Y por la tarde nos encontramos otro de los fenómenos también más curiosos que vimos durante el safari. Una pareja de leones copulando. Pero no una o dos veces, varias! y eso es debido a que los leones pueden llegar a aparearse hasta 100 veces al día!! El pene del macho es espinado y contiene más de 100 pequeñas púas! Cuando la hembra está en celo se retira durante unos días de la manada y el macho la «acompaña» todo el día.

SEXTO DÍA DE SAFARI

Nos levantamos sabiendo que teníamos todo el día por delante para estar de safari por el parque así que fuimos más tranquilos. El hotel nos preparó una cesta con bebidas y comida para poder tener provisiones a media mañana y así no tener que volver a las instalaciones a la hora de comer.

Lo primero que vimos nada más empezar el día fue una cría de jirafa recién nacida. Es emocionante ver como un ser vivo puede tener tan solo unas horas y ser tan grande pero a la vez tan frágil. Debe de aprender rápidamente a caminar y a luchar por su supervivencia. En la foto que os enseñamos fue el momento en que pudimos presenciar como la recién nacida aprende a caminar. Nacen con un peso de unos 90 kilos, caen al suelo desde una altura de dos metros y se ponen de pie en tan solo 20 o 30 minutos!! Asombroso!!!

Según nos comentó el guía el momento en que nace una jirafa es muy delicado porque puede llegar en cualquier momento algún depredador y que la ataque.

– Jirafa recién nacida junto a su familia –

Las jirafas son un animal que no es difícil de ver durante el safari, y no solo por su altura, sino porque abunda en el territorio. Ahora bien, no hay que equivocarse entre el tipo de jirafa que vimos en el parque de Samburu que en Masai Mara. Si os fijáis en la fotografia de arriba, las manchas de las jirafas son diferentes a las de la fotografía de abajo.

– Jirafas reticuladas en Samburu –

Las manchas en las jirafas reticuladas están muy bien definidas y mantienen un color marrón uniforme en cada una de ellas. Cubren la mayor parte de su cuerpo, incluso el rostro y cola. Son una especie autóctona de Samburu. El período de gestación de una jirafa es de 15 meses y dan a luz a una cría. Una madre puede tener un máximo de ocho crías en toda su vida.

Seguimos la mañana dando vueltas por el parque, la verdad es que nos pareció muy complicado saber como el guía se orienta en esos espacios tan abiertos. Ahí es cuando realment te das cuenta que es imposible hacer el safari por tu cuenta!! jajaja

– Reserva Natural Masai Mara –

A media mañana paramos para comer. En medio de la nada, el guía nos preparó un picnic al más puro estilo de película. Bajo un árbol en la sabana africana, con una cesta de mimbre llena con unos sandwiches, refrescos, fruta y algo dulce para acabar, pasamos la hora de la comida. Estábamos en la gloria!!

Y después de comer y descansar un poco, retomamos el camino para seguir descubriendo nuevos caminos y disfrutando de los animales y la naturaleza. ¡Cuál fue nuestra sorpresa al encontrarnos al Rey de la Selva caminando solo por el parque! ¿Dónde se dirigía? Pues según nos dijo el guía valía la pena seguirlo, y así hicimos!

Nos adelantamos con el coche hasta donde estaba una leona con sus cachorros. En la fotografía no se puede apreciar bien, pero detrás de la leona, entre los matorrales, había 3 cachorros jugueteando entre ellos. Interpretamos que el león iba en busca de ellos.

Las hembras dan a luz a una camada de entre una y cuatro crías. Suelen tenerlas en una madriguera, una zona protegida habitualmente separada del resto de la manada. Las crías nacen ciegas y no abren los ojos hasta aproximadamente una semana después de su nacimiento. Pesan entre 1200 y 2100 g al nacer y se encuentran prácticamente indefensas, las mueve de sitio para evitar dejar rastro y que el olor alerte a depredadores que quieran cazarlas. En general, la madre se reintegra al grupo con sus crías cuando estas tienen entre nueve y diez semanas.

– Leona protegiendo a sus cachorros en los matorrales –

Las hienas también es un animal que puedes ver en Masai Mara. Son clanes matriarcales, en el que las hembras son dominantes. Las hienas tienen un potente sistema digestivo que les permite digerir piel, dientes y huesos, considerada una carroñera.

Las hienas son capaces de realizar numerosos sonidos a través de sus vocalizaciones, llantos, llamadas y el más reconocido, la risa, mediante el cual avisan al restos de miembros del clan de la presencia del alimento. No es extraño sentir sus pisadas junto a tu tienda, por suerte nosotros dormimos bastante bien y si que escuchamos ruidos de aves e hipopótamos pero de hienas no. Menos mal!

– Hiena –

SÉPTIMO DÍA DE SAFARI

Nos dispusimos a hacer un último y pequeño safari antes de coger la carretera para que Frank nos llevara a Nairobi donde pasaríamos la noche y al día siguiente coger un avión destino Zanzíbar.

El trayecto de Masai Mara a Nairobi volvía a ser un camino largo y un poquito pesado. Cada dos o tres horitas paramos para estirar un poco las piernas, ir al lavabo y ver alguna tiendecita de artesanía autóctona. Una de las paradas que hicimos durante el recorrido fue el mirador del Gran Valle del Rift, desde donde se pueden contemplar unas vistas espectaculares de Kenia.

– Vistas desde el Gran Valle de Rift –

En las tiendas de artesanía puedes encontrar desde figuritas de madera talladas a mano hasta pulseras, collares y pinturas. Estas tiendas suelen estar en lugares de paso para los turistas que el guía conoce y te lleva para poder ir al lavabo, comprar un refresco y aprovechar a comprar algún recuerdo o regalito para la familia. Nosotros nos compramos unas pulseras muy chulas hechas a mano, unos platos pintados a mano y algún detallito más para la familia.

Una vez llegamos a Nairobi volvimos a alojarnos en el mismo hotel donde ya estuvimos la primera noche y aprovechamos la última noche para ir a cenar a Carnivore, un restaurante muy característico de Kenia donde hasta hace unos años se podía comer carne de muchos tipos de animales como la cebra, la jirafa, el cocodrilo… Hace ya unos años que eliminaron algunas de las especies que se podían probar para protegerlas y la carne más exótica que se puede probar hoy en día es el cocodrilo.

En un lugar un tanto turístico, no lo vamos a negar, pero también es verdad que vale la pena verlo y porqué no  probar nuevos sabores típicos de la cultura africana. El servicio es muy bueno y los camareros son muy simpáticos y amables y visten unos uniformes muy particulares.

– Restaurante Carnivore –

Y hasta aquí este post, viajeros. Esperamos que os haya gustado y que al leerlo os hayan entrado ganas de hacer un safari pronto!!! Os lo recomendamos!! Visitar la sabana africana y disfrutar de su naturaleza, paisajes y animales… es una experiencia única e inolvidable 🙂

Esperamos vuestros comentarios!

También puede gustarte...

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *